¿Qué demonios ha metido esa hija lujuriosa en el té de su padre, algún tipo de estimulante? Quería deliberadamente que él se empalmara, ¡y se paseaba por la casa en bragas! Y dónde podía ir el hombre si su cabeza ya había alcanzado el objetivo. Ninguna polla podía resistirse a esa tentación.
Que misteriosos son los policías de hoy en día, con cualquier pretexto van al palo del té. Y el ama de casa es muy agradable, también iría a ella. Era una tía muy avanzada, me la daba en todos los agujeros sin problema. ¡Maldita sea, yo también quiero un ama de casa así! Qué suerte tuvo el tío, estaba en el lugar adecuado en el momento adecuado, se la folló bien.
# Me masturbaría #